“Diálogos por el Bicentenario”

En el marco de las actividades programadas para celebrar los 200 años de la Autonomía de Catamarca y dentro del ciclo “Diálogos por el Bicentenario”, se realizó en la tarde del viernes 7 de mayo el conversatorio “Fray Mamerto Esquiú, el ciudadano y santo catamarqueño” a cargo de dos integrantes de la Comisión Diocesana Esquiú, fray Pablo Reartes y el Prof. Mario Daniel Vera.

En esta charla vía Google Meet los expositores abordaron la vida del Beato Esquiú desde distintos aspectos ya que el ilustre fraile catamarqueño, a lo largo de sus 56 años de vida transcurridos desde 1826 a 1883, desarrolló numerosas actividades siempre pensando en el bienestar material y espiritual de sus comprovincianos y compatriotas ya que fue un hombre que consagró su vida al servicio de Dios y de la Patria.

El Prof. Mario Vera desarrolló el accionar educativo, político, periodístico y la valiosa contribución a la pacificación nacional que realizara Fray Mamerto Esquiú, mientras que Fray Pablo Reartes se explayó sobre la vida sacerdotal y su valioso accionar como misionero, evangelizador y obispo.

Luego de un ameno conversatorio, que fue moderado por el Prof. Carlos Rubén Carabajal, los disertantes respondieron a las numerosas preguntas las que hacían referencia al proceso de beatificación y a la importancia del Beato Esquiú para los argentinos del siglo XXI.

Entre los conceptos vertidos por el Prof. Mario Daniel Vera, un hombre que desde más de dos décadas trabaja por la difusión de la Causa Esquiú, rescatamos estos párrafos: “Fray Mamerto Esquiú fue un hombre fundamental de nuestra historia y es una figura imprescindible para los argentinos del siglo XXI. Ejemplo de superación, trabajador incansable, docente destacado, profundo intelectual, mensajero itinerante de la Palabra de Dios, sacerdote ejemplar, evangelizador, misionero, obispo. Fue un hombre comprometido con los problemas de su tiempo y consciente de las necesidades de su pueblo”.

En los cargos que ocupó manifestó permanentemente una sabiduría que traspasaba el plano humano: escuchando la voz de su pueblo fue legislador, convencional constituyente, consejero de gobierno y periodista en la Provincia de Catamarca; profesor de teología y filosofía en prestigiosos centros educativos de América Latina, fue el primer diputado del departamento Valle Viejo y con su voz cargada de patriotismo fue el orador de la Constitución Nacional bregando por la paz y la unidad de todos los argentinos.